martes, 1 de octubre de 2013

Hoy he querido sentirme más cerca de ti..................................

Grande Perales, grande. Genios como él no deberían morir nunca mami.
Bueno, ya sabes Eva y sus problemas. Necesitaba hablar, necesitaba gritar, y para eso me viene genial esto. Estoy un poco harta de esto. Demasiado sufrimiento últimamente, me cansa, me agota.
Me canso de fingir 24 horas que todo está bien, y que soy la persona más feliz y con menos problemas del mundo. No me gusta que me afecte tanto todo.
El domingo Ricardo volvió a visitar el Hospital. Dice que es su segunda casa, por eso se compró su nueva casa tan cerca, jejeje. Típico de los Muñoz Delgado: hacer creer a todo el mundo que no pasa nada, y que todo está bien. Cuando entramos a la UCI, con una sonrisa nos dijo que no era jueves y que todavía no habían pasado siete años desde que se murió papá. Si es que no pude hacer otra cosa que abrazarle y decirle que no se puede ser más carabanchelero que él.
Yo sé que él tiene mucha suerte, como diría el Pater Peter, tenemos enchufe (yo le digo que estamos súper enchufados todos). Y es que tenemos tres ángeles cuidando de nosotros en todo momento, y que son los culpables de todo lo bueno que nos pasa.
No le tocaba mami, estoy segura de que no le tocaba. Igual que tú, tiene un pequeño gran corazón que nos da grandes sustos de vez en cuando. La gran suerte de Ricardo (aparte de tener a papá, Paco y tú que cuidáis de él), es que a él le avisa. Su diabetes está controlada, y cada vez que viene el Sr. IAM a visitarle, siente dolor. A ti también te visitó muchas veces a lo largo de tu vida, hasta que aquel fatal 16 de mayo pudo más él que tus ganas de vivir y de conocer a tus nietos.
En fin, en fin, muchas gracias por estar ahí el domingo evitando que Ricardo ganase sus alas. Conociéndote seguro que organizaste una buena allá donde estés, y seguro que no dejaron pasar a nadie ese día por si era Ricardo, jejeje.
Mañana hará diez días que Alicia no está con nosotros. El puto cáncer ha ganado la batalla. Te acuerdas mamá cuando nos decía que Cristina viviría con ella cuando sus padres faltasen? Pues va a ser que no. Debería estar prohibido, pero los padres de Alicia han sobrevivido a su hija mayor. Al menos, Alicia ha dejado en la tierra a Sergio, un precioso niño de ocho años que no entiende muy bien por qué su madre ya no está aquí. No lo entiendo yo que tengo 40, normal que no lo entienda Sergio.
Yo también decía que Paco viviría conmigo cuando vosotros no estuvierais ya aquí. Él también se ganó las alas demasiado pronto. Siempre es demasiado pronto, pero a él le tocaba irse ese día. Ahora sí lo entiendo, aunque sigo tremendamente enfadada con la vida (seguro que tú le llamarías Dios, yo ahora le llamo vida) por habérmelo quitado aquel jueves de madrugada.
Y por supuesto sigo sin entender por qué no me dejaron que me despidiera de ti aquel jueves también. Sólo pedía unos minutos, unas horas, en fin, en fin. Él dejó que te fueras sin que pudiera pedirte perdón por todo. Perdón por mis palabras del uno de mayo. Nunca voy a perdonar que no me permitiera darte un último beso cuando aún estabas viva. Ahora sé que te tenías que ir, ahora sí lo entiendo, pero jamás voy a perdonar que te arrancaran de mi tan a traición.
Nunca voy a superar que te fueras, para mi era demasiado pronto, siempre es demasiado pronto mamá.
Me gustaría odiarle (me refiero a tu Dios), pero no me enseñaste a hacerlo.
Aquel día creía que odiaba a todo el mundo, especialmente a ese doctor que me dijo que te llevara a casa a comer y que luego regresáramos a la tarde para que te viera Jesús. Estuviste muriéndote todo el día, tu corazón se estaba rompiendo, y ese impresentable sólo sabía preguntarte cuántos bollos habías desayunado. Si en lugar de hablar mal de Jesús, se hubiera molestado en hacerte un electro........................ Probablemente también te hubieras muerto, pero todo habría sido más fácil de asumir, habían hecho todo lo posible por ponerte bien para conocer a tu nieto. Es lo único que le decías a Jesús y a Alicia cuando les viste a la tarde antes de entrar en coma. No sabías qué te pasaba, pero estabas muy malita. Y es que el Sr. IAM en los diabéticos es indoloro. Todos tus niveles se habían descompensado por culpa del maldito IAM, no al revés como creían todos.
Jesús sólo sabía chillar y pedir una ambulancia. Cuando por fin vino, yo no podía ir contigo, Jesús me dijo que llamase a Yuri y que recogiese a Larota. Te estabas muriendo, habías entrado en lo que Jesús creía que era un coma diabético. No podía creer lo que estaba oyendo, seguro que no era verdad. No podías morirte, todavía no...............................
Ahora tocaba hablar con Fuencis, pero no nos podíamos permitir que Ismael no naciera por culpa del disgusto. Fuencis acababa de abandonar el reposo absoluto en el que estuvo los seis primeros meses de embarazo. Así que, como pude (todavía no sé cómo llegué) cogí a Larota, la subí al coche conmigo y me fui a casa de Fuencis. Afortunadamente me abrió la puerta Roberto, y le pude decir llorando que te estabas muriendo y que se lo tenía que decir a Fuencis................................
Nadie se lo creía, estabas tan llena de vida el día anterior, todo parecía una pesadilla de la que todavía yo no he despertado. Luego fui a tu casa y le dije a Ricardo que te estabas muriendo y que estabas en el Hospital de Getafe. Después me fui al Hospital, acababas de llegar.................. Cuando pasé por admisión, enseguida salió el cardiólogo de urgencia. Me dijo que entrara en una habitación que había muy cerca. Lara no podía pasar conmigo y se quedó con unas enfermeras en admisión hasta que Yuri llegó y la recogió.
El médico me preguntó qué te había pasado, le expliqué, me dijo que me sentara y allí casi me muero yo. Me explicó que no era un coma diabético, que era el Sr. IAM, que te habían puesto dos marcapasos, pero que tu corazón estaba muy muy dañado. Habían pedido un cateterismo de urgencia al Hospital de la Princesa. No iba a servir de nada, me lo dijo así el cardiólogo, pero querían quemar el último cartucho. No podía parar de llorar, estoy no te podía estar pasando, era todo una broma.................
Salí de aquella habitación, ya estaban allí todos, y nos fuimos a la UCI de cardiología. No te podíamos ver, estaban esperando una UVI móvil para trasladarte a la Princesa. Eran las tres de la tarde, los médicos nos dijeron que fuéramos a la Princesa nosotros y entregáramos todos los papeles en admisión.
Llegamos a urgencias del Hospital de la Princesa, allí nadie sabía que ibas a venir. Ya eran las diez de la noche y todavía no habías llegado: todos pensábamos que te habías muerto en Getafe o en el camino, pero nadie abría la boca, nadie quería escuchar del otro que no estabas ya con nosotros.
Por fin Yuri se levantó, eran las doce de la noche ya. Había cambio de turno, y aprovechó para preguntar si sabían algo: no sabían nada, pero la enfermera le dijo que iba a llamar a Getafe. Habías salido de allí quince minutos antes. Tu estado era extremadamente grave, y la ambulancia iba muy muy despacio. Habías tenido otra parada en el camino y tuvieron que reanimarte, no podía estar pasando esto, era una broma pesada.................................
Por fin apareciste, era la una menos cuarto de la madrugada del jueves. Los médicos salieron enseguida, te estaban esperando, sabían que llegabas y llegabas VIVA. Nos fuimos todos a la UCI de cardiología, allí saldrían los cardiólogos para informarnos de cómo había ido el cateterismo.
Eran las dos y cuarto, y salió el cardiólogo que te operó: "Lo siento mucho" nos dijo a Fuencis y a mi. Pero se ha muerto? pregunté yo. No, todavía no, pero su corazón está roto. El infarto ha sido muy muy gordo. En unos minutos la podrán ver nos dijo......................................
Tu corazón se había roto, y en ese momento el de todos los que te queríamos también se rompió en mil pedazos. No podía estar pasando, ahora no............... Nos dejaron verte. Pregunté a una enfermera cuándo te despertarías, si me hubiera dicho que no te ibas a despertar.........................................
Me respondió que dependía de las personas, pero tú estabas ya comprando tus alas en esos momentos. Tu marido fue el único que se atrevió a besarte. Yo quería esperar a que estuvieras despierta, pero ese último beso nunca llegó.
Los médicos nos dijeron que nos fuéramos a casa, que nos avisarían si pasaba algo por la noche. Allí no hacíamos nada. Yo tenía que esperar a que viniera Yuri, se había ido con Lara para que pudiera dormir nuestra niña. Todos se habían ido ya, y yo no sabía que hacer para no dejar de llorar.
Se me ocurrió entrar en la capilla del hospital, ya sé que en esos momentos no valía, pero como habían hecho contigo y con tu corazón, tenía que intentarlo. Hablé con tu Dios, le pedí un poco de tiempo, minutos lo que pudiera. Necesitaba pedirte perdón y sentir que me perdonabas..............
Llegó Yuri con nuestra princesa de los ojos azules, y nos fuimos a casa. A las cuatro de la mañana sonó mi móvil, era Ricardo. No quise cogerlo, le pedí a Yuri que lo hiciera. Tu corazón había empezado a  funcionar peor, y el resto de los órganos también estaban fallando. Aquí se volvió a partir de nuevo mi corazón............................
Dejamos a Larota con mi suegra y nos fuimos al Hospital de la Princesa. Estábamos llegando cuando Fuencis llamó a mi móvil: Ven rápido, se está muriendo........................................... es lo último que escuche, el móvil se me cayó y empecé a llorar..........................................
Cuando llegamos ya te habías muerto, y no te podía ver porque estabas en el tanatorio del hospital. No estaba pasando, mi cabeza repetía una y otra vez que no era verdad. Era lo que quería creer, necesitaba creer que no había pasado, así sería menos difícil....................................
Eran las seis de la mañana, no sabía qué hacer, necesitaba gritar, me parecía todo demasiado injusto. Que me perdone papá, pero por qué te habías muerto tú y no él???? Me enfadé con la vida, y la vida era todo. Perdí la voz, creo que eso fue cosa tuya. Me conoces perfectamente y sabías que podía liarla, así que me dejaste sin voz dos días, 16 y 17 de mayo.....................
El 17 de mayo te llevamos a tu terrenito, por fin descansabas en paz, aunque yo no quisiera............... Y por fin, estabas otra vez con Paco.........................
Tardé mucho en aceptar que no ibas a volver. Tu muerte ha sido lo peor que me ha pasado en la vida. Nunca fui consciente de todo lo que te quería hasta que te perdí. Ahora que estaba aprendiendo a ser hija, porque acababa de ser madre,....................................................
Tu Dios quiso que tres meses después de tu partida naciera Ismael, en el mismo hospital donde murieron o casi murieron dos de mis ángeles....................... Fuencis y yo lloramos cuando nos vimos, faltabas tú, tenías tantas ganas de ser abuela......................... Ahora sabemos que sí estabas allí.............
En fin, en fin, me gustaría odiarle pero como ya te he dicho antes no sé cómo se hace. También me gustaría poder ignorar y odiar a tu hijo mayor, pero tampoco puedo. Y sé que me hace mucho más mal que bien, pero no sé odiarle. Porque cuando se ha querido tanto como yo le he querido a él, es difícil pasar al otro extremo. Me parece que de todos los Muñoz Delgado, él es el único que se parece a la familia de papá. Es mala persona, maleducado e impresentable. Se me ocurren muchísimos más calificativos, pero sé que no te gusta que me meta con él. Por eso prefiero callar................
Bueno gordi, te dejo ya, voy a ver si estudio un poquito, jejeje. Acabo de recibir los libros que tenía encargados. Los encargué ayer y ya hoy están aquí.
Un abrazo grande, grandísimo, y millones de besos al cielo. La mayoría son para ti, el resto son para mis otros dos ángeles. Te quiero, ya sabes, mucho, más, muchísimo..........................